Outsourcing, un fenómeno que no para de crecer

El Outsourcing consiste básicamente en la contratación de una empresa prestadora de servicios, como por ejemplo Grupo Castilla, para que se ocupe de la realización de funciones no básicas y, de ese modo, conseguir que los empleados de la empresa contratante dediquen sus esfuerzos a llevar a cabo actividades más productivas.
Existe una gran cantidad de empresas importantes que subcontratan trabajos, como es el caso de los servicios de call center, gestión de nómina (mediante software de nominas) y servicios de correo electrónico, entre muchos otros. Tales tareas son efectuados por empresas externas que están especializadas en cada servicio y que, incluso, pueden estar radicadas en otros países.
En verdad, son muchas las razones que existen por las que las empresas deciden subcontratar distintos trabajos, pero la principal es siempre el ahorro de dinero dado que los proveedores de servicios de outsourcing son capaces de llevar a cabo las tareas encomendadas por menos dinero, debido a que este tipo de empresas de deben proporcionar beneficios a sus empleados y poseen menos gastos generales.
Al mismo tiempo, la tercerización posibilita a las empresas concentrarse en otros asuntos y, de ese modo, ahorrar tiempo, puesto que los detalles quedan a cargo de expertos ajenos a las mismas. Esto quiere decir que una buena cantidad de recursos y atención puede utilizarse para alcanzar mejores resultados y centrarse en las cuestiones más funcionales de la empresa.
Las empresas proveedoras de servicios de outsourcing, con frecuencia son ágiles y disponen de capacidades de características internacionales. Al tiempo que suelen tener un acceso a la nueva tecnología, a la que una empresa común quizá no tenga acceso por no poder darse el lujo de adquirirla por su cuenta. Inclusive, si una empresa está buscando expandirse, la subcontratación representa una manera efectiva para comenzar la construcción de bases sólidas, tanto en otros países como en sus respectivas redes de mercadeo.
Existen ciertas desventajas de la contratación externa, pues ésta a menudo acaba con la comunicación directa entre una compañía y sus clientes, pudiendo llegar a producir insatisfacción en uno o ambos lados. De todos modos, el outsourcing es un fenómeno que no para de crecer puesto que las ventajas que ofrece son sensiblemente superiores a las desventajas.